Hakan no quiere regresar a Brasil, pero no sabe como decirle a Lissy que no puede ofrecerle más la vida que han comenzado a soñar fuera de Cuba. Hakan se enfrenta a su indecisión cuando Lissy descubre que le ha ocultado una posibilidad para salir de la isla. Sin más opciones para quedarse, Hakan debe asumir que no es más la misma persona para poder regresar a casa.